Bolsonaro publica foto hospitalizado por “secuelas de la cuchillada”

Un día después de que sus simpatizantes invadieran las sedes de los tres poderes, en Brasilia, el exmandatario ultraderechista fue hospitalizado y dado de alta por dolor abdominal intenso, anunció la primera dama de Brasil.

Jaír Bolsonaro ha sido hospitalizado en varias ocasiones, la última hoy, en Orlando (Florida, Estados Unidos) —donde reside— y dado de alta, con diagnóstico de dolor abdominal y obstrucción intestinal, según comunicó en su cuenta de Instagram Michelle Bolsonaro, esposa del expresidente, por secuelas de una herida con arma cortopunzante que sufrió en 2018, en el abdomen.

En contexto: Jair Bolsonaro, hospitalizado por una obstrucción intestinal

En horas de la noche, el expresidente brasileño tuiteó una foto suya en una cama de hospital, y anunció que, “después de ser apuñalado en Juez de Fuera (estado de Minas Gerais), me sometí a cinco cirugías“.

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Bolsonaro también afirmó que, en esta ocasión, volvió a ser hospitalizado por presentar adherencias intestinales.

“Agradecidos por las oraciones y mensajes de pronta recuperación“, agregó el exmandatario.

Aunque también requirió atención hospitalaria por la misma causa en julio de 2021 y enero de 2022, Bolsonaro no tuvo que ser operado.

¿Por qué Bolsonaro tiene adherencias intestinales?

El intestino puede obstruirse por múltiples causas, como trastornos inflamatorios (enfermedad de Crohn, diverticulitis), tumores o algunos alimentos.

Sin embargo, en el caso de Bolsonaro, que afirma sus dolencias intestinales comenzaron tras ser apuñalado cuando estaba en campaña presidencial, en 2018, la causa más probable es las cirugías a las que ha tenido que ser sometido.

Esto se debe a que el intestino, al igual que la piel, cicatriza tras sufrir una lesión, lo cual disminuye su movilidad (peristaltismo) necesaria para evacuar las heces.

En su hospitalización previa, Bolsonaro publicó en su cuenta de Twitter que requirió una sonda nasogástrica, la cual, en estos casos, suele colocarse para aliviar la retención de gases, ya que la parte del intestino que está antes de la obstrucción se ensancha y se llena de líquido y aire que, normalmente, deberían avanzar. Esto provoca hinchazón (distensión abdominal) y dolor.

Cuando la obstrucción no permite que el líquido y el aire pasen, la persona ya no puede eliminar los gases ni defecar (estreñimiento), por lo cual, en ocasiones, se debe realizar una desimpactación fecal, es decir, extraer las heces manualmente.

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