Gustavo Petro, más cerca de Dios, ¿más lejos de la izquierda?

La llegada de Alfredo Saade al Pacto Histórico y el apoyo de Bernardo el ‘Cura’ Hoyos han levantado fuertes críticas entre sectores progresistas que incluso han acompañado a Gustavo Petro.

Este martes, Petro publicó en su cuenta de Twitter una foto junto a Alfredo Saade, un líder cristiano que, públicamente, se ha opuesto al aborto, al matrimonio igualitario y a la legalización de la marihuana, temas que supuestamente deberían ser centrales en una agenda progresista como la que Petro dice representar.

Con la foto, el senador confirmó la llegada de Saade al Pacto Histórico como precandidato presidencial. “Un pacto es también con las diferentes creencias religiosas de Colombia”, dijo Petro.

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La alianza Petro-Saade se une a otro respaldo que ha levantado ampolla: el del exalcalde de Barranquilla Bernardo el ‘Cura’ Hoyos, condenado por corrupción, quien ha estado haciendo campaña por Miguel Ángel del Río, abogado de Armando Benedetti y precandidato a la Cámara por el Atlántico.

Saade, entre amores y odios con el Pacto Histórico y Gustavo Petro

El pasado 11 de septiembre, Alfredo Saade confirmó que Levántate, el movimiento cristiano que lidera, estaba teniendo contactos con Gustavo Petro para unirse al Pacto Histórico. La noticia generó un gran revuelo entre opinadores de izquierda. Saade, en su cuenta de Twitter, ha dejado en evidencia que sus posiciones políticas se alejan de lo que se espera de un aliado de los sectores progresistas:

“De dónde sacaron que a los papás les toca así de chévere aceptar que su hijo o hija son homosexuales o ladrones o prostitutas o políticos corruptos” (10 de diciembre de 2020), “Si con quien te vas a cuadrar te dice que no le gusta leer, huyeeee, debe ser proaborto” (19 de febrero de 2020), “El aborto NO ES LA ALTERNATIVA. La alternativa es no tener relaciones sexuales antes del matrimonio” (11 de febrero de 2020), “El país no puede prohibir las cátedras religiosas en las aulas. Corremos riesgo de degradación social y moral” (5 de octubre de 2012), “El matrimonio entre homosexuales es pura paja” (9 de octubre de 2012), entre otras.

Ante la andanada de críticas, el líder cristiano respondió que ya había cambiado. Aseguró que ya no era el “Alfredo Saade que existía, un hombre radical, cerrado“, y que ahora era un “Alfredo Saade abierto que a hoy día está trabajando para poder edificar al país sobre unos fundamentos inamovibles“. Sin embargo, dejó claro que no borraría ninguno de sus polémicos mensajes: “Mis trinos, de pronto, quizá, fueron desafortunados para algunos, quizá para otros no fueron desafortunados, pero yo no borro los trinos por eso, porque siempre habrá un trino“, le dijo a La W, el 13 de septiembre.

Saade duró un tiempo defendiendo su posible unión al Pacto Histórico, pero su entusiasmo empezó a apagarse al finales de septiembre, cuando reveló que la coalición aún no le había respondido su solicitud para unirse. Unos días después, el pasado 5 de octubre, anunció que declinaba su intención de ser precandidato del Pacto.

A partir de ese momento, Saade arreció sus críticas contra el Pacto Histórico, incluso mencionando a Petro. Hace tan solo dos semanas, por ejemplo, lanzaba frases como esta: “Gustavo Petro propone un pacto con los líderes religiosos del país, pero se le olvida que en el Pacto Histórico no nos abrieron la puerta”. O también arremetía contra otros miembros del movimiento, como el senador Roy Barreras, pues su esposa, Gloria Arizabaleta, será candidata al Senado.

Pero todo cambió esta semana y ahora Saade está reconciliado con el Pacto Histórico, con la bendición de Petro.

Entre las personas que han criticado la decisión está la socióloga Sara Tufano, que dista mucho de ser una contradictora de Gustavo Petro. Tufano, de hecho, se ha referido a aquellos petristas que no le ven problema a la alianza: “¿Por qué cuestiono a @petrogustavo? Porque creo en él y en su proyecto político; porque creo que si se asesora mejor tal vez llegar a la presidencia no sería tan difícil. Pero algunos piensan que ‘hacer política’ es ser lambón y no crítico. Así nunca van a cambiar a Colombia”, escribió la académica en Twitter.

Otros le han pedido a Petro que no cometa el mismo error que cometió en diciembre de 2008, cuando estaba en el Senado y votó a favor de elegir como procurador general a Alejandro Ordóñez, que ya era conocido por sus posturas de derecha. Y cuando Gustavo Petro llegó a la Alcaldía de Bogotá, Ordóñez fue su mayor piedra en el zapato, pues lo destituyó e inhabilitó por 15 años (aunque la sanción después se cayó).

Hasta el concejal de Bogotá Carlos Carrillo, del Polo Democrático (uno de los partidos del Pacto Histórico), criticó la llegada de Saade y pidió claridad sobre qué se acordó con él.

Bernardo Hoyos y Miguel Ángel del Río

Una de las figuras con las que el Pacto Histórico quiere dar un golpe de opinión es Miguel Ángel del Río, un penalista que ha acompañado sonados casos judiciales. Además de ser el abogado de Armando Benedetti, también es el de Deyanira Gómez, exesposa de Juan Guillermo Monsalve, el testigo clave en el caso contra Álvaro Uribe Vélez.

Entre las personas que han celebrado la candidatura de Del Río a la Cámara de Representantes está el senador Iván Cepeda, quien lo describe como “un destacado jurista y un consecuente defensor de los derechos humanos”.

Sin embargo, para algunas personas, el hecho de que Bernardo Hoyos respalde abiertamente a Del Río es un factor que los disuade de votar por él. Hoyos, exsacerdote y defensor de la Teología de la Liberación, fue alcalde de Barranquilla dos veces (1992-1994 y 1998-2000).

El cura Hoyos llegó a la política presentándose como un personaje alejado de las grandes estructuras políticas y, aun hoy día, presume de ser un gran contradictor del clan Char. Pero contra Hoyos hay una condena en firme por celebración indebida de contratos.

Según la Fiscalía General, Hoyos, en 1998, suscribió un contrato para comprar un lote en el que supuestamente se levantarían unas 35.000 viviendas de interés social que nunca se construyeron. En 2011, en primera instancia, el exalcalde fue condenado a cuatro años de cárcel por el delito de celebración de contrato sin cumplimiento de los requisitos legales, pero absuelto del delito de peculado por apropiación a favor de terceros.

En 2013, el Tribunal Superior del Distrito de Barranquilla amplió la condena contra Hoyos a diez años al considerar que él sí había sido responsable de peculado por apropiación a favor de terceros. Es decir, mantuvo en firma el anterior cargo.

El exsacerdote interpuso una tutela para que la Corte Suprema de Justicia revisara su caso, pero el alto tribunal dejó en firme la sentencia de 2013.

Por otro lado, según la Fiscalía, también en 1998, Hoyos autorizó un giro por más de 3.400 millones de pesos para el contratista Fernando Thorne para supuestas obras adicionales en un contrato de “remodelación y adecuación de un edificio para el despacho de la Alcaldía Distrital (…), sin contar con los soportes contables ni contractuales”. Por ese caso, en junio de 2020, el exmandatario de Barranquilla fue condenado a siete años de cárcel.

Actualmente, Hoyos cumple su condena en detención domiciliaria, en el barrio Rebolo de Barranquilla. Como reveló La Silla Vacía, el domingo pasado, el exalcalde estuvo en un evento del Pacto Histórico, celebrado en esa zona, y en septiembre el senador Benedetti se reunió con el cura Hoyos en su casa.

“En la casa del cura también estuvo Miguel Ángel del Río (…) expresándole su admiración y dialogando sobre el futuro del pacto”, dice La Silla.

Del Río respondió a la nota del portal con un tuit en el que decía que los miembros del clan Char “están muertos de miedo”.

Si el Pacto Histórico quiere seguir mostrándose como un movimiento progresista y alejado de la corrupción, habrá que ver qué impacto tendrán los apoyos de Saade y Hoyos entre sus electores. Lo que ahora muchos opinadores le piden al petrismo es que acepte las críticas y cuestione ese tipo de alianzas.

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