Derecha e izquierda en los Ministerios de Cultura

“No es fácil articular políticas de derecha en cultura. Pero la verdad es que el Ministerio de Cultura –que probablemente tiene otros males– no fue una institución reaccionaria”.

La izquierda cultural mexicana habla mal del gobierno cultural del izquierdista Andrés Manuel López Obrador. Es ya una costumbre que el sector cultural afirme que el estamento se cae a pedazos. Dicen que AMLO mató el ecosistema del libro y que hoy Paco Ignacio Taibo convirtió todo en podredumbre.

La izquierda chilena cultural –en cambio– mantiene la esperanza en la nueva ministra de Cultura, Julieta Brodsky. Su primer diagnóstico ya indica que las políticas culturales del gobierno de derecha están muy deterioradas, lo que puede ser cierto, pues fue muy mediocre ese Ministerio.

Algunos intelectuales progresistas dicen que el primer ministro de Cultura del Perú, Ciro Gálvez, del gobierno de izquierdas de Castillo fue muy parecido a un Montesinos por lo malo y autoritario. Sacó a Ezio Neyra de la dirección de la Biblioteca Nacional peruana, que hacía un trabajo fenomenal desde hace años y que era un referente en el continente. Después, ese gobierno eligió otra ministra de Cultura, pero solo duró tres meses y la echaron. Los consensos son siempre difíciles en la era Castillo.

Le puede interesar: 'Revista Cambio', cuidado con la arrogancia

¿Y Colombia? Claro, aquí el Ministerio de Cultura es un ministerio de derechas, aunque no lo parece del todo. Mejor dicho, empezó como de centro-derecha moderada (la era Carmen Vásquez), siguió más intenso (con la derecha de la ideología naranja de Buitrago) y después se moderó, mostrando una fase más “centro fajardista”.

Angélica Mayolo –puede ser la ministra más popular de la era Duque– representa la vuelta de tuerca con su estilo lleno de energía, juventud y empatía, aunque su agenda enfocada en el Pacifico y el Caribe (que aplaudimos) puede estar afectando su gobernanza en los asuntos de las artes, las políticas y las culturas más urbanas.

Mayolo lo sabe: hay que mostrarse, ser visible, sobre todo con solo siete meses de Ministerio que quedan. Ya vendrán las preguntas: ¿qué tipo de impacto hemos cosechado con tantos años de enfoque étnico y de territorios –que viene desde Paula Moreno– en un país atravesado por otras tantas fuerzas tan disimiles? ¿Cómo se plantea la continuidad de la economía naranja, tan asociada a Duque, en nuevos gobiernos, incluso en los de derecha que desean desmarcarse de Duque? Preguntas todas muy aburridas, volvamos pues al cotilleo.

Le puede interesar: Buitrago y la caída de la naranja
Angélica Mayolo, ministra de Cultura | Ministerio de Cultura
Angélica Mayolo, ministra de Cultura

Me parece interesante que en esta fase final de nuestro Ministerio de Cultura incorporen en unos cargos más importantes al sociólogo Víctor Manuel Rodríguez como nuevo director de Artes y en la dirección de CoCrea a Pilar Ordóñez.

El primero es de las personas que más conoce el sector cultural en Colombia y sus políticas públicas. Ha pasado por gobiernos de izquierda y derecha municipal en distintos cargos (mi hipótesis de los pases ideológicos del sector cultura sigue vigente). La segunda es una de las más performativas gestoras culturales con mucha experiencia en antiguos ministerios, secretarías y centros culturales. Fichajes mayores para un corto periodo en un gobierno de derechas.

Algunos dirán: un Ministerio desdibujado en su intencionalidad política no riñe ya con nada. Es cierto, en el pasado tuvo salidas en falso durante el paro, el episodio contra Lucas Ospina fue penoso y las preguntas sobre el desinterés del Ministerio por la seguridad de los gestores culturales hechas por el petrismo cultural.

Pero al mismo tiempo recorran las exposiciones actuales del Museo Nacional y verán una propuesta absolutamente progresista en la visión de la cultura. Y pues los enfoques étnicos y diferenciales culturales de la ministra en los territorios suelen ser más de izquierda. Lo sé, Buitrago fue el verdadero ministro de derechas (el tuit de las estatuas fue su culmen). Pero después la ministra Mayolo –que lo sucedió– inauguraría una exposición relativa al lugar de las mujeres en la historia en la Biblioteca Nacional que podría haber sido curada en cualquier gobierno de izquierdas de la región.

Le puede interesar: Turbay y su libro-legado del Ministerio de Cultura

En fin, todo es confuso en el campo gubernamental de la cultura. Y a nadie le importa mucho, pues la mayoría de funcionarios medios del Ministerio son progresistas o lo parecen y los pobres cabalgan en un gobierno que se articula extrañamente con la cultura y cuyos directores no siempre saben por cuáles arenas ideológicas caminar.

Lo sabemos, nunca nada es muy claro en relación con la política cultural y la verdad no es fácil articular políticas de derecha en cultura. Pero la verdad es que el Ministerio de Cultura –que probablemente tiene otros males– no fue una institución reaccionaria. Lo bueno es que, como lo mostré al inicio, ser de izquierda no garantiza ministerios de izquierda y viceversa y en el mismo modo y en sentido contrario.

Lea más de Nicolás Morales Thomas: El mejor corresponsal en Colombia, Sergio Gómez Maseri

3 Comentarios

Deja un comentario

Diario Criterio