Peajes, un pago que se pierde en quién sabe qué bolsillo
¿Cuánto recaudan mensual o anualmente los peajes en Colombia? ¿Quién controla esos recursos? ¿A dónde va destinada la inversión? ¿Quién maneja esos contratos de concesión?
Estas y otras preguntas surgen cuando se viaja en carretera y hay que pagar peajes, el mínimo, de 9.200 pesos, y van subiendo hasta los que valen 17,500 pesos y más para vehículos particulares. Los de transporte público, camiones y similares tienen costo mayor.
Realmente son exagerados los peajes que existen en las vías colombianas y nula la inversión que se observa en las mismas. Entendiendo que el recaudo es con el fin de hacerle mantenimiento a la malla vial y conservarlas en perfecto estado, según las voces de la Ley 787 de 2002, dice:
“Artículo 1°. Modificase parcialmente el artículo 21 de la Ley 105 del 30 de diciembre de 1993, el cual quedará así:
Artículo 21. Tasas, tarifas y peajes en la infraestructura de transporte a cargo de la Nación. Para la construcción y conservación de la infraestructura de transporte a cargo de la Nación, esta contará con los recursos que se apropien en el Presupuesto Nacional y, además, cobrará el uso de las obras de infraestructura de transporte a los usuarios, buscando garantizar su adecuado mantenimiento, operación y desarrollo. Para estos efectos, la Nación establecerá peajes, tarifas y tasas sobre el uso de la infraestructura nacional de transporte y los recursos provenientes de su cobro se usarán exclusivamente para ese modo de transporte”.
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En el Valle del Cauca las vías intermunicipales se encuentran en pésimo estado, sin señalización, sin iluminación, con tantos huecos que desalienta el ánimo al momento en que se pagan los peajes.
Solo entre Ginebra y Rozo hay dos (2) peajes, y del estado de la vía ni se diga. Hay que navegar por instrumentos. De noche, solo se sospecha por donde se conduce. No hay demarcación, las iluminarias no existen, en fin, una serie de carencias que en el momento de un accidente son elementos probatorios para reclamar o bien al departamento o a la Nación, dado que es demasiado el abandono en que se encuentran estas vías.
Las preguntas del inicio de este texto nacen de la insatisfacción de los usuarios de las vías, además, cuando hay congestión vial no existen planes de contingencia que descongestionen estos peajes, sabiendo que, con el dinero recaudado, tranquilamente se puede pagar personal de apoyo. Ahora, en ocasiones, lo hay, pero no alcanza para cubrir tanto vehículo y dinero que deben recaudar. Es decir, no saben adonde echar la plata…
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Escuché a varios representantes a la Cámara por el Valle del Cauca e incluso senadores, manifestando que regularían los peajes, pero se quedó en veremos.
Duele pagar, duele ver el estado de las vías, duele sentirse un contribuyente de pago del impuesto automotor, de los excesivos peajes y no sentir que ese dinero se invierta.
Las veedurías ciudadanas deberían enfocarse en exigirle al concesionario vial que asuma su competencia, o al departamento o a Invías o a la agencia nacional que corresponda, que no dilaten más y que se invierta el dinero recaudado en lo que debe invertirse: en el mejoramiento de la malla vial. Es prevención, es seguridad, es vida lo que se protege con esas acciones.
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Vemos cómo se caen puentes, cómo hay derrumbes en las vías, cómo hay intersecciones viales sin semaforización ni demarcación; cómo en largos trayectos viales no hay policía de carreteras, cómo se pierde el dinero en el bolsillo del concesionario o en alguna parte ‘hace aguas’, porque en las vías poco o nada se invierte.
Existe una legislación que regula los peajes, pero como muchas de las leyes en nuestro país, quedan en mero saludo a la bandera.
Seguramente en otros departamentos sucede igual: no hay inversión, no se exige a quien recauda que invierta el dinero, siguen sucediendo accidentes en la vía, la iluminación no existe y, por tanto, el dinero que se paga no es utilizado debidamente.
Hay que comenzar, como sociedad civil, a pensar en un movimiento que reclame el buen mantenimiento de las vías, que en estas elecciones sea una causa o una pretensión que se haga a los candidatos, ya que los congresistas quedaron debiendo, una vez más, una promesa que en campaña pregonaban a todas voces.
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Artículo fechado 24 de agosto 2023 y toma vigencia ahora que Petro anuncia incrementos en los peajes en éste diciembre y en enero 2024. Si es preocupante la falta de control al dinero recaudado 🤔