Eso fue lo que no me gustó de la presentación de Lorenzo: esa imagen final de él mostrando la camiseta de la selección rodeado de Jesurún, González Alzate y Jaramillo, todos con cara de amargura y tristeza
Eso fue lo que no me gustó de la presentación de Lorenzo: esa imagen final de él mostrando la camiseta de la selección rodeado de Jesurún, González Alzate y Jaramillo, todos con cara de amargura y tristeza
Qué año raro el 2022. Es decir, estamos en junio de un año de Mundial y, por tanto de Elecciones en Colombia, y no hay Mundial, sólo Elecciones, en donde la cosa está tan apretada que, en vez de cerrar el camino electoral con contraste de propuestas y argumentos, estamos viviendo un festival de trapitos al sol
Con todo el respeto de Moura, de Di María y de los medios argentinos, brasileños y españoles, cuando vi a Di María dormir la pelota en su cabeza frente a Italia en lo único en lo que yo pude pensar fue en Carlos Enrique ‘La Gambeta’ Estrada.
El fútbol colombiano recibió otro golpe que ratifica el tremendo problema estructural en el que vive: no vamos a tener ningún árbitro en cancha en Catar 2022.
Alejandro Pino Calad hace un recorrido por la siempre emocionante historia que une al rock con el fútbol.
En esta versión criolla de El traje nuevo del emperador, Ramón Jesurún va empeloto en su ineficiencia y corrupción y nadie en su corte es capaz de decirle nada.
Llegar Catar resultaría un premio absolutamente inmerecido para una entidad corrupta y de pésimo manejo administrativo como la Federación Colombiana de Fútbol.
Hace años todos los actores del FPC estamos dejando morir esta empresa. Claro, los principales responsables son los corruptos que mandan, pero si no reaccionamos los demás, esto va a seguir yéndose al carajo
La Guerra con Perú no fue la primera de Colombia con una nación vecina, pero sí fue la última y la más importante, y por eso, en tiempos de guerra en Europa, vale la pena recordar cómo fue y el impacto cultural que tuvo, especialmente en nuestra concepción de nación y en nuestra relación con el deporte.
El discursito de que la Federación Colombiana de Fútbol apoya y promueve el fútbol femenino, cosa que es su obligación por estatutos, sólo se lo creen quienes lo quieren creer
“Para Colombia, el ciclismo ha significado la reivindicación de territorios olvidados históricamente por el poder y la unión de un pueblo que ve en los escarabajos unos héroes con los cuales se puede identificar”.
Sería maravilloso tener un Gran Premio de F1 en Colombia, pero no es más que una ilusión.
“El chiste es bobo, pero los dirigentes del fútbol colombiano no. Ellos son de teflón y todo les resbala porque se han esforzado para armar una estructura que permita que no les pase nada”.
Es imposible que en un país en donde pasan las cosas que pasan, en donde la corrupción se salió hace rato de lo que Turbay llamó “sus justas proporciones”, el fútbol no sea sucio. El problema es que acá ya está podrido.
¿Y los hinchas, y la historia, y la gloria, y los recuerdos? Bien gracias, esas sirven para vender boletas y suscripciones al canal oficial del FPC, pero en verdad a los dirigentes les importa un carajo.
“La plata es la puerta del fútbol, y muchas veces los sobornos son la llave. Las personas de esta industria ya se malacostumbraron a que sin plata no pasan cosas y eso, tristemente, lo estamos viviendo en el fútbol colombiano”.